jueves, 26 de octubre de 2017 Reseña: Sueños Rojos Publicado por Leyna en 18:23

Con tan solo veintiún años, Verónica está sola en el mundo y se acaba de quedar en la calle. Desesperada, decide darse una noche loca para olvidar el marrón monumental que es su vida.Esa noche de fiesta se convierte rápidamente en una oportunidad para cambiar su futuro...

Y su futuro puede que se llame Caleb, estrella del baloncesto y conquistador nato, que rápidamente se queda prendado de ella y le ofrece un trato: ella no tiene piso y él tiene un montón de dinero: ¿por qué no se muda con él?

Por primera vez en su vida, Caleb ha encontrado algo que desea desesperadamente. Pero Verónica no está dispuesta a entregarse.

Como suele pasar con la mayoría de libros del género, Sueños Rojos cuenta con unos cuantos cliqués (chico rico, guapísimo y mujeriego que jamás había querido una relación estable hasta que conoce a la protagonista, una joven con un pasado complicado que resulta ser la primera en el mundo en rechazarlo). En general no me molestan porque, aunque trilladas, estas historias me siguen gustando. El tópico que sí me ha molestando y que he visto ya en varias novelas es que ella sea virgen. En serio, todo ese rollo de hombre que ha estado con mil mujeres y joven virgen y pura está más que pasado, sobre todo en libros actuales. En histórica lo acepto, en juvenil o young adult depende de cómo se haga me rechina o no, ¿pero en New Adult? ¿Con chicas de veintitantos y/o que van a la universidad? Me cabrea. Y no porque no haya chicas vírgenes a esas edades, perfecto; el problema es que sea un patrón y que se busque hacer la relación más especial, como si fuera a ser menos bonito porque ellas hubieran estado con más chicos (igual que los protagonistas también han estado con otras antes de conocerlas).

Sin embargo, hay un par de detalles que pueden ser típicos y que en esta novela no se dan, cosa que agradecí enormemente. El primero es que Caleb no es un malote arrogante y chulo. Sí, a veces se tira flores y suelta alguna fantasmada, pero lo hace de broma y de forma sana, más para picar o distraer a Veronica (o Red, como él la llama) que para ensalzarse. Por otro lado, el romance no es tóxico en absoluto, al contrario: Caleb tiene a Verónica en palmitas; cuidándola, mimándola y besando el suelo que pisa. Se pasa toda la novela intentando derribar sus defensas y acercarse a ella, pero no con retos, manipulaciones o tiras y afloja: con cariño y dulzura.

Aunque esos aspectos hacen que la obra gane puntos, la historia en general no me ha acabado de convencer, principalmente por dos motivos. El primero es que el enamoramiento por parte de él es lo más repentino que he leído en mi vida. Muchos libros poseen el ya famosos instalove, pero lo de Sueños Rojos es otro nivel. Es surrealista que Caleb tenga pensamientos del tipo "No soporto que hablen así de ella" cuando Verónica y él sólo han intercambiado frase y media. Las citas y sentimientos descritos en un sinfín de historias cuando los protagonistas se enamoran aparecen ya durante las primeras páginas de ésta. 
El otro factor que me ha impedido disfrutar más del libro es que, en este caso, se nota mucho que viene de Wattpad por el esquema que sigue la trama. Igual me equivoco, pero siento que no está pensado desde el principio sino que se iba escribiendo según surgía (sin tener una dirección clara). Se nota que a veces se pretende crear interés incorporando a personajes nuevos que no cuadran del todo o metiendo escenas algo forzadas. De ahí también que haya tantas idas y venidas por parte de Verónica: pasa de querer alejarse de Caleb a desear estar con él en un parpadeo. Una o dos veces pueden dar más emoción a su relación, pero que esté constantemente distanciándole y atrayéndole como si fuera un yoyó me resultó muy cansino y repetitivo. Verónica da un paso con Caleb, pero luego hay que volver a hacer algo para que eso no suceda… y el recurso utilizado durante casi todo el libro es que se lo piense mejor y decida mantener las distancias. Así una y otra vez, apenas pasa mucho más. Demasiado redundante para mi gusto.

Los capítulos están narrados por ambos personajes principales, excepto en un par de ocasiones en las que el contar los hechos recae en miembros secundarios del elenco. 
Verónica es una joven desconfiada, insegura y distante. Por la portada pensaba que sería atrevida y cortante, pero fue una sorpresa descubrir en ella a una chica muy vulnerable. Caleb es un amor: cariñoso, atento, paciente, alegre, seductor y con un toque infantil e inmaduro que hace que tenga actitudes espontáneas y naturales. Kara pronto se convierte en un gran apoyo para nuestra protagonista: directa, con mucho carácter, ingeniosa y mal hablada. Alucinaba (a la par que me partía) con las perlitas que soltaba.

El final es cerrado en cuanto a la pareja principal (su historia podría quedarse ahí) pero se nota que habrá continuación porque otras tramas secundarias están en el aire. Personalmente tengo curiosidad por saber más sobre algunos personajes.

Sueños Rojos es el primer libro de la trilogía Chasing Red, cuya segunda parte (Besos Rojos) se publicará el 16 de noviembre y la tercera (Deseos Rojos) en mayo de 2018.

Leyna