Willow

Los padres de Willow murieron en un trágico accidente de coche, dejándola no solo con el dolor que supone enfrentarse a una pérdida sino también con el peso de la culpabilidad, ya que era ella quien conducía. Ocho meses después, su hermano mayor casi no le habla, cree que sus compañeros de clase le culpan por lo ocurrido y Willow se evade del sufrimiento con el que carga marcando todo su cuerpo con las heridas del pasado. Pero cuando un chico llamado Guy descubra su secreto, nacerá una intensa relación que conseguirá sacarla de ese mundo extraño que ella misma se ha formado.

Es difícil guardar un secreto cuando lo llevas escrito por todo el cuerpo.


Antes de comprar el libro, le vi en muchos sitios de internet. Más de una vez me había encontrado con esa portada y esa sinopsis tan poco atractivas para mí.
Sinceramente, la historia de una chica huérfana a causa de un accidente en el que ella conducía, y que además se corta, no me gustaba en absoluto. Le descarté desde el principio. Me olía a dramón desde lejos; tenía toda la pinta de ser un libro deprimente en el que la protagonista no hace más que regodearse de su dolor y bla bla bla...
Aún así, un día (después de "tropezarme" con él en la web una vez más), pensé que si tanto se anunciaba sería por algo; por lo que empecé a buscar críticas y reseñas. Todas eran muy buenas, y gracias a eso y a que en la mayoría se destacaba que no era el drama deprimente que parece (al contrario), decidí darle una oportunidad.

Y no me arrepiento.

Willow es una chica vulnerable que se hace la fuerte, que cree tener claro lo que quiere y que no se permite sentir ninguna emoción placentera (ese es el motivo que hace que en ocasiones den ganas de zarandearla)
Y Guy es un encanto. Inteligente, comprensivo, generoso... y buenísima persona.
Me encanta la conexión y la relación de confianza que hay entre los protagonistas, es muy tierna y dulce.

La historia no es rara, pero a mí me ha pasado algo raro con ella. A medida que iba leyendo más y más, me daba la sensación de que no pasaba nada en la historia, que las escenas y los diálogos podrían ser los de cualquier persona normal; pero me gustaba.

Es un libro bonito, que te hace pensar y que no es para nada trágico; al contrario, todo se desarrolla desde una perspectiva bastante optimista.
El final es lo mejor, mi parte favorita; aunque las dos últimas páginas son un tanto precipitadas y he echado en falta más amor.

Willow: entretenido, interesante y encantador.


Leyna

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