
Hace más de medio siglo que Japón se quedó a
oscuras. Nadie puede entrar ni salir de la isla, salvo los soldados de
élite del Skytree: traidores, ladrones y asesinos que solo llegan para
morir enfrentándose a seres terribles. El capitán NEAL KELLUM cometió un error imperdonable y ahora está decidido a hacer que su muerte cuente, pero la nueva recluta de su compañía, KIERA AMELL,
va a ponérselo muy difícil. Ella no cree en las normas, ni en la
disciplina, ni en el respeto hacia la autoridad; pero, por encima de
todo, Kiera oculta algo y Neal va a intentar descubrir qué es, aunque
eso signifique acercarse tanto como para experimentar emociones que no
había sentido en mucho tiempo, emociones peligrosas que
podrían condenarlo de nuevo. La emperatriz ECHO AKIYAMA
está al frente de un imperio que agoniza. Conoce bien el deseo y la
pasión, pero no el amor, siempre lejano e inalcanzable debido a su
posición… hasta que aparece ALEXA LALANNE, que lo ha sacrificado todo para encontrarse con ella y hacerle una advertencia: van a destruir su mundo. El rebelde MARKEL SAGASTIZABAL es el prodigio que podría tener la clave para romper el bloqueo y salvarlos a todos, pero se ha reencontrado con KAI INOUE, un asesino a sueldo sin escrúpulos que conoce bien la única debilidad de Markel: el propio Kai.
¡Qué viaje! Si ya conoces a Paula Gallego, sabes que le encanta el drama, la tensión y los personajes con cicatrices del alma… y en este libro no se queda corta.
Imperio de sombra y tormento me atrapó desde el primer capítulo. La ambientación es brutal: una versión distorsionada de Japón, llena de secretos oscuros, criaturas que dan escalofríos, y un imperio que claramente se cae a pedazos. Es de esos mundos donde sientes que todo puede estallar en cualquier momento.
Lo que más me gustó fue la tensión constante, tanto externa (la política, las amenazas, la corrupción), como interna entre los personajes. La historia se mueve en un imperio brutal, oscuro, con una sociedad
bastante jodida (perdón, pero es así). Aquí no hay buenos ni malos "de
manual", todo es gris. La protagonista es de esas que te hacen gritarle
al libro tipo: “¡¿Por qué haces esto?!”, pero al mismo tiempo la entiendes, la sufres con ella y quieres que se salve de todo.
El romance... uff, ese enemies to lovers
bien hecho, con tensión, con miradas que dicen más que mil palabras,
con esa sensación de que en cualquier momento TODO puede explotar. Paula
lo lleva al límite, y cuando piensas que no puede haber más drama...
pues sí, hay más drama. Es adictivo.
Lo bueno es que no se queda solo en la historia de amor. Hay mucho más detrás: conspiraciones, traiciones, misterios sin resolver. La sensación de que todo está conectado con algo más grande me mantuvo pegada a sus páginas.
Y el worldbuilding, una pasada. Sin
ser pesado, te mete en un mundo que se siente vivo, lleno de peligros,
con reglas propias y una oscuridad constante que no es solo literal. Se
nota que la autora se curró los detalles.
Eso sí, preparaos para sufrir, pero no es pura tristeza sin sentido. Tiene
momentos preciosos, frases que te rompen y personajes secundarios que
también brillan.
Imperio de sombra y tormenta me dejó con muchas ganas de más. Tiene esa mezcla que a mí me encanta: fantasía, drama, intriga política y romance. Si os gustan las historias donde nada es blanco o negro y los personajes tienen capas y cicatrices, dadle una oportunidad.
Leyna