Como
ya expliqué AQUÍ, decidí leer los dos libros juntos con una plantilla
que compartió la autora, ya que me parecía más ameno e interesante leer
ambos puntos de vista a la vez en lugar de primero uno y luego el otro.
Me
alegro inmensamente de haberlo hecho así, puesto que la historia de
Perséfone por sí sola se siente floja y sosa: queda reducida a un mero
romance sin chicha y con apenas unos toques de fantasía. Pensaba que la
trama paranormal, lo referente al Olimpo y a los poderes de Perséfone,
tendría mucho más protagonismo, y en realidad tenemos más escenas de
ella como periodista que como diosa.
Mi
opinión de La caricia de la oscuridad mejoró por leerlo junto a A game
of fate: de otra forma me habría resultado una novela del montón y,
acabando tan cerrada, no sé si habría sentido ganas de leer la segunda
parte. Perséfone me cayó bastante mal; encuentro que es un personaje
superficial, caprichoso y en el que no se profundiza. Hades, en ese
mismo libro, no pasa del prototípico protagonista masculino misterioso y
poderoso; y los secundarios son completamente olvidables.
En
A game of fate, sin embargo, descubrimos todos los matices de Hades,
sus claroscuros, conocemos sus miedos y motivaciones y consigue que
empaticemos con él. Es mucho más cercano e interesante y se convierte en
el personaje que lleva el peso del libro sin pegas.
Los
secundarios también son geniales. No sólo conocemos más a otros dioses
en general, si no que Afrodita, Hermes, Hefesto o Hécate juegan un papel
importante. Me encantó que se centre en las deidades y sus respectivas
historias y rivalidades (Poseidón también me llamó mucho la atención).
La
trama del POV de Hades es mucho más rica y atrayente: además del
romance también encontramos más fantasía y una subtrama de misterio,
acción y política. Siento que esta versión de la historia es muchísimo
más completa y entretenida.
Otro
aspecto a su favor es que el libro de Hades explica muchas cosas que
ayudan a entender mejor tanto lo que pasa como los comportamientos del
elenco. Detalles que en la versión de Perséfone quedan sin explicar o se
sienten extraños y repentinos se entienden perfectamente cuando los cuenta Hades (y quedan muy bien expuestos).
La
narración también me ha gustado más en A game of fate. Dejando de lado
la regulera traducción de La caricia de la oscuridad (con frases
demasiado literales y tiempos verbales caóticos que van cambiando en la
misma escena) se nota que la autora ha evolucionado de una novela a
otra, mejorando su escritura, añadiendo más descripciones y creando
diálogos más elaborados.
Como
podéis comprobar, mientras que la perspectiva de Perséfone no me ha
aportado gran cosa, el punto de vista de Hades se caracteriza por una trama
interesante, personajes que hacen querer saber más de cada uno de ellos y
un interesante vistazo al Olimpo y sus deidades.
Leyna