Érase una vez una joven pareja que se enamoró perdidamente pese a pertenecer a familias rivales. Probablemente conoces la historia y como acabó (pista: mal, fatal), pero en realidad no es así como termina: Romeo y Julieta viven felices y comen perdices… y también son mis padres. Me llamo Rose y soy la mayor de sus siete hijos, con énfasis en «mayor», porque con veinte años ya me consideran una solterona. Pero ¿quién puede pensar en matrimonio cuando te has criado entre apasionadas declaraciones de amor, versos recitados a la luz de la luna y besuqueos constantes? ¡Es agotador! Hasta ahora he logrado esquivar el altar presentando a mis pretendientes a prometidas más adecuadas, pero parece que no conseguiré deshacerme del viudo duque Stephano, cuyas anteriores esposas (tres, para ser exactos) han tenido «finales desafortunados». Sin embargo, la noche de nuestro baile de compromiso, aparece con una daga clavada en el pecho. Media Verona tiene motivos para asesinarle, pero cuando todos a su alrededor comienzan a desaparecer, morir o volverse locos, sé que debo encontrar al culpable antes de que me encuentre a mí.
Estamos ante una reinterpretación de la historia de Romeo y Julieta, pero no son ellos quienes nos contarán su trama, si no su hija mayor. En esta versión, ambos amantes sobreviven y tiene una vida feliz, repleta de amor y de mucha descendencia.
Rose es su hija mayor y es una joven bastante escéptica; al fin y al cabo, ha vivido escuchando las alabanzas de la gran historia de amor de sus padres y está un poco cansada de tanto bombo. Me encanta cómo la autora juega con la historia y cómo aprovecha todos los elementos para aportar su dosis de sorpresa y originalidad. La perspectiva de que sea su hija quien narra enriquece muchísimo el argumento, ya que responde preguntas que seguro que más de una persona se había hecho, como qué hubiera pasado si Romeo y Julieta hubieran sobrevivido, cómo serían como padres, qué tipo de ideal del amor transmitirían a sus hijas e hijos, etc..
Esta obra es una mezcla entre Los Bridgerton y Puñales por la espalda. Tenemos ese ambiente de matrimonios de conveniencia, bailes, pedidas y demás parafernalia unido a un misterio sobre ciertos asesinatos que están teniendo lugar. Todo ello coronado con humor. Con mucho humor.
Y estos son dos de sus ingredientes principales: el misterio y el humor. La autora es increíble a la hora de jugar con los enredos, los malentendidos y sobre todo, de crear escenas cómicas que os harán reír a carcajadas. En cuanto al misterio, está lleno de intriga y es igual de divertido que el resto del libro. Se trata de un misterio histórico narrado por una voz moderna; dos elementos que, a mi parecer, casan muy bien.
El romance también es otro aspecto del libro, pero no es el amor dramático que vivieron sus padres; Rose es una persona práctica y racional y su historia será muy diferente. Aunque ella experimenta un amor a primera vista, cliché que no me gusta, lo he disfrutado en este caso en concreto porque aprecio la ironía de la situación. He entendido completamente lo que pretendía hacer la autora. El resto de las interacciones entre ella y su amado se caracterizan por diálogos ágiles e ingeniosos.
El final es muy entretenido y acaba con un gran cliffhanger. Deseando que se publique el siguiente libro de la saga.
Hija de la bella Verona es una obra muy divertida, entretenida y amena. Si os apetece una novela histórica de misterio con personajes graciosos y encantadores tenéis que darle una oportunidad.
Leyna
4 golosinas:
Hola.
Lo tenía en la mira pero no estaba segura. Tras tu reseña tengo claro que debo leerlo, gracias por ayudarme a decidir jeje.
Un saludo :)
¡Hola! No lo conocía pero parece que sí que puede estar entretenido. Un besote :)
hola Leyna! no lo conocía y la verdad es que no me esperaba una historia así, puede estar entretenido :)
bye~~
Tomó nota. Me gusta esa autora. Te mando un beso y gracias por la reseña.
Publicar un comentario